Persigue asumir y promover el desarrollo humano como enfoque pleno para alcanzar
el bienestar de todas las personas en sus distintas dimensiones, para lograr
de modo sostenible una vida digna. En su rica doctrina social, la Iglesia entiende
el desarrollo humano de manera integral, de modo que no deja ningún aspecto
de la vida humana por fuera, ni excluye a ninguna persona. En definitiva, el
esfuerzo por el desarrollo humano es la correspondencia de las personas a la
oferta de vida plena que nos da Jesucristo.
El empeño por el desarrollo humano integral y solidario es el camino
para concretar el trabajo por el bien común. De ahí que este eje,
más que un conjunto de acciones con este propósito, es un eje
transversal que orienta toda la labor de la Pastoral Social-Caritas. Sin embargo,
priorizamos algunos temas específicos. En los últimos años
hemos venido prestando especial atención al área de la Economía
Solidaria. La promoción de esta, además de la reflexión
y difusión del modelo, la procuramos vivir consecuentemente en nuestro
proyecto de Encadenamientos Solidarios. [link].
También, al importante compromiso de la Arquidiócesis de San
José en favor de la población en situación de calle, mediante
la Casa Hogar San José, y al apoyo de la Diócesis de Alajuela
al programa de rehabilitación Kairós, la Pastoral Social-Caritas
ha iniciado a partir del año pasado a delinear un camino de apoyo a la
labor de Hogares CREA. Este apoyo se orienta a robustecer a este importante
programa, que a lo largo de casi treinta años ha tendido la mano a miles
de personas adictas a drogas en el país. Nuestro compromiso asume también
el reto urgentísimo de la prevención.